Voces desde el campo 1
Configurando el futuro de Nyéléni a través de la convergencia desde la base
Tammi Jonas, Alianza Australiana por la Soberanía Alimentaria (AFSA por sus siglas en inglés)
Configurar el futuro de Nyéléni exige un enfoque concreto y radical basado en las luchas vividas por les campesinxs, pescadores, pastores, trabajadores del sector alimentario y pesquero y comunidades locales. En el Foro Global Nyéléni celebrado en Kandy, afirmamos que la soberanía alimentaria es un proyecto político de liberación, cuya fuerza reside en la convergencia desde abajo, donde construimos la unidad a través de estrategias compartidas de resistencia y transformación.
La AFSA acudió a Sri Lanka aceptando el reto de reunir a más movimientos, como una delegación de campesinxs, pueblos indígenas y organizadores sindicales arraigados en la lucha cotidiana contra la apropiación empresarial de los alimentos y la tierra en la denominada Australia. Aunque nos organizamos en un contexto en el que el capitalismo colonialista sigue desposeyendo a los pueblos indígenas y la agricultura industrial domina las políticas y los paladares, también conseguimos victorias concretas sobre el terreno que muestran cómo se practica la soberanía alimentaria.
Mediante la organización colectiva, hemos luchado durante más de 15 años por el reconocimiento estatal y nacional del papel fundamental que desempeña la agricultura a pequeña escala para alimentar a las comunidades locales y reducir la temperatura del planeta. Hemos modificado las leyes de planificación en apoyo de la agroecología y la infraestructura de transformación en nuestras granjas, nos hemos resistido a la represiva regulación sobre seguridad alimentaria y hemos incorporado los principios de la UNDROP a nuestra labor de incidencia a nivel nacional. Estas victorias no han sido una concesión de los gobiernos, sino que se han logrado gracias a la movilización de base y la organización democrática. Este es el enfoque que llevamos a Sri Lanka: convergencia a través de la organización, no de la consulta; competencias construidas desde abajo y en solidaridad con nuestras ONG aliadas, pero sin delegarlas en ellas.
En el foro, trabajamos en solidaridad con nuestros compañeros para defender el liderazgo feminista y la participación de les jóvenes y las personas de género y sexualidad diversos en la toma de decisiones. Manifestamos nuestro enfoque interseccional, ejerciendo incidencia codo con codo con les pastores, los pueblos indígenas y les trabajadores para garantizar que sus luchas sean visibles en nuestras acciones y campañas colectivas. Insistimos en que Nyéléni debe seguir rindiendo cuentas a los movimientos sociales, con una coordinación política clara y una toma de decisiones colectiva liderada por campesinxs, pueblos indígenas, pastores, pescadores y trabajadores de la alimentación y la pesca.
Regresamos a casa cargados con el voto de Nyéléni de levantarnos contra las cadenas de la deuda extractiva, dispuestos a desmontar la mentira de que nuestro futuro deba hipotecarse a los poderosos. Juntos construiremos un mundo libre del imperialismo financiero, porque la revolución no será prestada.
Voces desde el campo 2
Nyéléni en Kandy: Fortaleciendo los movimientos sociales de Sri Lanka
Anuka De Silva, Movimiento por la Reforma Agraria y Territorial (MONLAR por sus siglas en inglés), La Vía Campesina
En 2022 el país afrontó una importante crisis política, social y económica generada por una grave crisis de deuda, corrupción generalizada, la hegemonía del poder y la elevada inflación de los alimentos. La gente se echó a las calles para exigir reformas políticas, democracia, justicia y soberanía nacional. La población de Sri Lanka desempeñó un papel fundamental en elcambio del panorama político del país. Es lo que ha hecho que el movimiento social del Foro Nyéléni haya cobrado una importancia cada vez mayor para nosotros.
Como parte de las condiciones del FMI para el rescate financiero, Sri Lanka se ha visto obligada a aplicar una serie de medidas de austeridad, entre ellas la venta de algunos activos propiedad del Gobierno. Una de las instituciones afectadas por esta medida es el Instituto Nacional de Desarrollo Cooperativo (NICD por sus siglas en inglés), que se encuentra entre las propiedades que se considera privatizar. Con el apoyo de Nyéléni hemos parado la privatización del NICD.
¿Por qué es importante el Foro Nyéléni para los movimientos sociales de Sri Lanka?
Acoger el Foro Nyéléni ha ayudado a reforzar el poder colectivo de las diferentes luchas locales y poner de relieve la importancia de la solidaridad a la hora de abordar retos comunes. La convergencia en Nyéléni ha reunido a movimientos de base para exigir una acción colectiva destinada a desmantelar los sistemas de opresión.
Teniendo en cuenta de las luchas de les agricultores y la inseguridad alimentaria del país, la soberanía alimentaria es una herramienta vital para hacer frente al agronegocio que da prioridad a los beneficios sobre el bienestar de las personas. La construcción de una visión colectiva de la soberanía alimentaria y la creación de una agenda de acción política mediante la Declaración de Kandy siguen reforzando el impacto de nuestro movimiento. La convergencia de las luchas y la solidaridad sigue siendo la fuerza que puede conducir a una verdadera transformación, mucho mayor que un simple cambio político.
Está claro que el comité directivo de Sri Lanka en el foro ha sentado unas bases sólidas para la construcción de un movimiento a largo plazo, manteniendo a la comunidad en el centro de estos esfuerzos, alineando las luchas locales con la agenda global más amplia y participando con el gobierno para lograr reformas políticas y una verdadera transformación sistémica.
Voces desde el campo 3
Mujeres que construyen una transformación sistémica
Sarah Luiza y Bianca Pessoa, Marcha Mundial de las Mujeres Brasil
Desde el primer Foro Nyéléni, hemos afirmado que no puede haber soberanía alimentaria sin feminismo. Partiendo de nuestros logros, durante el 3er Foro Global Nyéléni se reconoció el feminismo como una parte fundamental de la agenda política común, por su perspectiva popular, anticapitalista, antirracista y anti-heteropatriarcal. No es posible lograr un cambio sistémico sin transformar las relaciones de desigualdad y violencia que sufren las mujeres en todo el mundo. Este ha sido nuestro gran avance: crear una lucha común para todas aquellas personas que desean un cambio radical en la sociedad y en el mundo en que vivimos. En este sentido, la Asamblea de Mujeres ha sido un espacio fundamental de convergencia.
Contamos con mujeres de todos los movimientos, regiones, sexualidades y etnias, afirmando la importancia de la diversidad en este proceso. Las mujeres tienen mucho que enseñar. Desde sus diferentes realidades, comparten experiencias de resistencia, de construcción de alternativas desde los territorios, demostrando que el feminismo no es una consigna vacía. Se construye a partir de la práctica cotidiana.
Las falsas soluciones del capitalismo verde impactan sobre las mujeres, las desplazan de sus territorios y amenazan sus vidas. De ahí que las mujeres defiendan la lucha por la soberanía energética y la justicia climática que es buena para las personas y no para el mercado. Para nosotras, la solución está en los territorios y en la vida. En el modo en que las mujeres se relacionan con la naturaleza y con la gente. De hecho, es el cuidado de la vida y del buen vivir en igualdad lo que construirá un mundo nuevo.
Afirmamos que la economía feminista es fundamental, reconociendo el trabajo de las mujeres y toda su contribución a la reproducción social de la vida, desde la perspectiva del cuidado, la igualdad y el buen vivir. Al mismo tiempo, afrontamos a diario la violencia que el capitalismo heteropatriarcal y racista inflige a nuestras vidas. Sobre esta base, se afirman y concretan en el 3er foro Nyéléni y en el camino a seguir las consignas fundamentales de la lucha feminista: la igualdad, la libertad, la justicia, la paz, la solidaridad internacional, la desmilitarización, la defensa de la democracia, los derechos y la paz, así como la soberanía alimentaria y la agroecología.
Voces desde el campo 4
Nyéléni y más allá: liderazgo y perspectivas indígenas en el movimiento global por la soberanía alimentaria
Nicole Maria Yanes, Opata, Consejo Internacional de Tratados Indios (IITC) y Colectivo NDN
Para los pueblos indígenas la soberanía alimentaria es una forma de vida. Conlleva la supervivencia de nuestros territorios, lenguas, culturas, ceremonias, historias, vestimenta y cada parte de lo que somos como pueblos. En todo el mundo, los territorios de los pueblos indígenas se encuentran en primera línea de la colonización y la extracción, enmarcados como «zonas de sacrificio» para pruebas militares, proyectos extractivos y el denominado desarrollo. Por ello, los pueblos indígenas se enfrentan ahora a los impactos más duros de la crisis climática provocada por los gobiernos y las corporaciones.
Les delegadxs indígenas desempeñamos un papel fundamental en el Encuentro Nyéléni, compartiendo nuestras prácticas de liderazgo comunitario, nuestros enfoques para la creación de consenso, nuestros conocimientos y ceremonias tradicionales, así como nuestra experiencia en materia de incidencia, negociación y creación de movimientos.
Hemos representado con éxito a nuestros pueblos de forma colectiva, recabando el apoyo de movimientos globales para nuestros esfuerzos actuales, entre los que se incluyen: la plena aplicación de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas; la petición a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura de que cumpla su compromiso de modificar el Código Internacional de Conducta para la Gestión de Plaguicidas a fin de incluir los derechos colectivos de los pueblos indígenas, especialmente nuestro derecho al consentimiento libre, previo e informado; lograr que las Naciones Unidas separen y no confundan, en todos sus documentos y decisiones, los conceptos de pueblos indígenas y de comunidades locales; y para el trabajo de LandBack de los pueblos indígenas para recuperar los territorios que fueron robados ilegalmente.
Aunque les participantes procedían de ecosistemas e historias de colonización distintos, Nyéléni nos recordó que la defensa de nuestra soberanía alimentaria necesita solidaridad, colaboración y una estrategia común. Vincular el trabajo que hacemos en nuestros territorios con los foros internacionales no es fácil y va más allá de nuestra reunión en Sri Lanka. La verdadera solidaridad requiere compromiso y voluntad para comprender las historias, las luchas y los objetivos de los demás a través de ecosistemas, idiomas y realidades políticas distintos a los nuestros. Además, es importante señalar que la agenda política y el impacto de la declaración dependen del uso y la aplicación que le den las personas mediante su uso.
En momentos como este, Nyéléni nos recuerda que la libertad y el futuro de nuestro colectivo son profundamente interdependientes. Nuestra liberación está conectada. Fortalecer las alianzas entre pueblos, regiones y movimientos no es solo una estrategia, sino una responsabilidad. Es un acto de supervivencia en estos tiempos de auge del fascismo y el autoritarismo.
Voces desde el campo 5
De Nyéléni a Belém. La lucha por la justicia climática como elemento de la convergencia
Martín Drago, REDES/ Amigos de la Tierra Internacional
Los responsables e impulsores del colapso climático y la degradación ambiental están íntimamente ligados a la desigualdad social, económica y de género que impera a nivel global. También son un pilar de la construcción y perpetuación del sistema energético actual, alrededor del cual las empresas multinacionales y los estados del Norte global han profundizado las relaciones coloniales. Por lo tanto, hablar de justicia climática es pensar en cambiar el sistema.
Para alcanzar la justicia climática es necesario transformar los sistemas económicos, sociales, políticos y energéticos, las relaciones sociales de género y nuestro vínculo con la naturaleza, a través de la puesta en marcha, y de forma masiva, de iniciativas populares para construir un nuevo modelo basado en la solidaridad internacionalista y la justicia social, económica, de género, racial y ambiental.
Para ello es imprescindible fortalecer el poder popular y sus organizaciones y transformar el sistema multilateral desde un enfoque internacionalista, solidario y de integración de los pueblos. Esta apuesta será posible mediante diferentes caminos que, compartiendo principios, características y estrategias comunes, transiten la construcción de poder popular de la forma que cada pueblo defina en su territorio[1].
La construcción de la justicia climática es uno de esos caminos y por eso un eje central de la convergencia popular para cambiar el sistema.
Voces desde el campo 6
Nyéléni – Sobre el motivo de la adhesión de RIPESS
Ruby van der Wekken, RIPESS
Hace dos años que RIPESS intercontinental, la red de economía solidaria respondió positivamente a la invitación de Nyéléni para unirse a su proceso. Desde entonces hemos participado en el Comité Directivo del 3er Foro Global Nyéléni. RIPESS como tal, participó en el proceso preparatorio de convergencia hacia una Agenda de Acción Política Común y concurrió al foro celebrado en Kandy, Sri Lanka con una delegación de 21 representantes de todo el mundo.
A través de les miembrxs de RIPESS presentes en el proceso Nyéléni, RIPESS ya sostenía desde hace 10 años que no se puede lograr la soberanía alimentaria sin un cambio sistémico económico, lo que implica, fundamentalmente, un cambio de la economía en su conjunto. Aunque los movimientos que se habían sumado al proceso Nyéléni ya estaban familiarizados con conceptos como la economía feminista y la economía del cuidado, la economía solidaria era menos conocida a nivel mundial, no solo como metodología, sino como visión que sitúa la agencia comunitaria y los valores sociales y ecológicos en el centro de la construcción de otra economía.
Es importante destacar también que RIPESS se unió al proceso Nyéléni por reconocer el gran potencial que tiene el cambio del sistema alimentario para el cambio sistémico en nuestras comunidades y, a través de ellas, en la sociedad. RIPESS desea contribuir a este proceso de cambio mediante los valores, principios y objetivos de la construcción de la economía solidaria como un proceso transformador de abajo hacia arriba.
Voces desde el campo 7
Luchas convergentes en la Lucha Global contra la Acuicultura Industrial
Feini Yin, North American Marine Alliance, NAMA (Alianza Marina Norteamericana)
La campaña «Haciendo frente a la acuicultura industrial» de Nyéléni tiene como objetivo abordar los apremiantes retos que plantea la acuicultura industrial y bloquear el desarrollo y la expansión de este tipo de operaciones en todo el mundo.
Al igual que la agricultura, la acuicultura —el cultivo de productos alimentarios marinos en el océano, en agua dulce o en tierra— puede practicarse de muchas maneras. Estas van desde formas tradicionales y agroecológicas, como los estanques piscícolas de los nativos de Hawai, hasta la acuicultura impulsada por empresas y a escala industrial. En este último caso, el agronegocio transnacional, los bancos, las grandes ONG Verdes y los organismos gubernamentales promueven la exportación del modelo de acuicultura industrial a nuestros océanos, utilizando eslóganes como «economías azules» y «revolución azul».
En realidad, la acuicultura industrial desplaza a les pescadores artesanales de sus medios de vida y territorios, contamina nuestras aguas y fomenta la mercantilización de nuestros alimentos. La producción de piensos para peces impulsa una mayor producción industrial de soja y maíz. También saquea los pequeños peces pelágicos de la costa occidental africana, extrayendo proteínas del Sur Global, donde millones de personas dependen de los pequeños peces pelágicos para su alimentación y sustento, para producir proteínas para los consumidores del Norte Global.
Se trata de una lucha global que tiende puentes entre los aspectos terrestre y marino de la soberanía alimentaria, entre el Sur Global y el Norte Global, y entre los movimientos por la justicia medioambiental, la salud global, los derechos laborales y los derechos de las mujeres. Nyéléni es un movimiento de movimientos, y como tal se compromete a organizar campañas coordinadas para garantizar la soberanía alimentaria, sanitaria y económica, y a oponerse al control corporativo sobre estas deteniendo y previniendo la acuicultura y la pesca industrial, la economía azul y la privatización de los bienes comunes oceánicos.
Voces desde el campo 8
La importancia de la salud pública para garantizar la soberanía alimentaria
Movimiento de Salud de los Pueblos (People Health Movement, PHM)
Si partimos de la definición de soberanía alimentaria, es evidente que una buena salud de los hogares (incluida la salud animal) es fundamental para mantener la seguridad alimentaria. También ocurre al revés: también se cumple: la seguridad alimentaria garantiza el acceso de los hogares a alimentos suficientes y nutritivos durante todo el año para mantener la buena salud de sus miembros.
En el ámbito de Nyéléni, la salud pública debería incluir medidas preventivas: a) agua y saneamiento (y control de vectores, como los mosquitos, cuando proceda,); b) acceso a una infraestructura de atención primaria sanitaria que funcione (incluida la atención primaria curativa y la vacunación); c) acceso a la salud primaria animal; y d) medidas de promoción de la salud.
La educación en materia de salud y nutrición será necesaria para lograr lo anteriormente citado: nos referimos a una educación que vaya más allá de los aspectos técnicos o clínicos, que explique las causas estructurales de las enfermedades, la malnutrición y las muertes evitables, y que destaque las medidas necesarias para abordarlas.
En el enfoque de la soberanía alimentaria, las personas deben participar activamente en la toma de decisiones y en el seguimiento de la aplicación de estos componentes de la salud pública. Esto aún no se cumple y sigue siendo un reto para les miembrxs de Nyéléni. El Movimiento de Salud de los Pueblos podrá proporcionar los inputs y el apoyo necesarios a nuestra amplia comunidad Nyéléni, basándose en las actividades que ha llevado a cabo durante dos décadas. (El Movimiento de Salud de los Pueblos cuenta con un grupo temático sobre nutrición y seguridad alimentaria que se ha reunido en un par de ocasiones, pero que no ha trabajado de forma regular. Paralelamente, la región latinoamericana del PHM creó un grupo regional sobre seguridad alimentaria que ha sido activo y ha tenido éxito, -estuvo representado en Kandy).
Por todas estas razones, el Movimiento para la Salud de los Pueblos se unió con entusiasmo al proceso Nyéléni 3 desde el principio, con el enfoque del derecho a la alimentación y el derecho a la salud, y con el enfoque compartido de abordar conjuntamente la determinación social de ambos. La lucha conjunta por la salud, la agroecología y la soberanía alimentaria aún está en sus inicios, y debemos hacer hincapié en la necesidad de incorporar más movimientos y organizaciones a Nyéléni para que se unan a nosotros en esta lucha.
Voces desde el campo 9
2026: Año internacional de los pastizales y les pastores
Fernando García-Dory, Alianza Mundial de Pueblos Indígenas en Movimiento y Pastores (WAMIP por sus siglas en inglés)
Nuestro movimiento pastoril global deposita muchas esperanzas en Nyéléni como un espacio para resistir codo con codo junto a otros movimientos de productores de alimentos con el fin de examinar el marco político actual que afecta a nuestros medios de vida y nuestras tierras, y formular propuestas conjuntas para encontrar alternativas a la crisis actual. Instamos a otros movimientos a que examinen nuestras reivindicaciones, desde la comprensión de los aspectos fundamentales de los derechos de les pastores hasta la expansión de la agroecología al pastoreo. Nyéléni es un valioso espacio de convergencia con otros movimientos que ha permitido avances importantes, como la UNDROP (Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales). Naciones Unidas ha declarado el próximo año, 2026, como Año Internacional de los Pastizales y los Pastores. Queremos garantizar de que les pastores ocupen un lugar central. La FAO y otros organismos deben comprender que representamos un modelo de producción con valor cultural, social y político que empodera a las comunidades, contribuye a la supervivencia de los pueblos nómadas indígenas y promueve la soberanía alimentaria.
Voces desde el campo 10
Acción de incidencia global para les migrantes y refugiados
Paloma Chen, Plataforma Transnacional de Migrantes-Europa (TMP-E)
El movimiento por la soberanía alimentaria presente en el Foro Nyéléni 2025 no se ha limitado al núcleo inicial de productores de alimentos a pequeña escala, como agricultores, pescadores, pastores, pueblos indígenas y trabajadores rurales, sino que se ha ampliado para incluir movimientos feministas y de justicia climática, migrantes, consumidores conscientes, investigadores académicos y artistas.
La lucha de los pueblos migrantes y les refugiadxs es inseparable de la lucha por la soberanía alimentaria y los medios de vida. La migración está profundamente vinculada a la industria alimentaria global corporativa, basada en la explotación, la deshumanización y narrativas utilitarias que reducen a les trabajadores migrantes a mano de obra barata. La lucha migratoria es una lucha común por la igualdad racial, de género y económica, la soberanía alimentaria y una transición justa cuyo fin es tejer la resistencia y las alternativas al sistema corporativo que se beneficia de nuestro desplazamiento, represión, explotación y muerte. Pero los lugares de producción de alimentos también pueden ser lugares de resistencia, dignidad y construcción del futuro. Nuestra participación en el Foro Nyéléni forma parte de un esfuerzo más amplio por fortalecer la convergencia entre las luchas (desde las campañas de regularización en Europa hasta las movilizaciones transfronterizas como las Caravanas) para exigir vivienda, salud, derechos laborales, soberanía alimentaria y justicia para todos.
A través de debates, presentaciones, talleres y grupos de trabajo, durante el foro nos hemos esforzado por construir una visión política unificada contra el sistema capitalista dominante, patriarcal, imperialista, colonialista, racista, basado en castas y supremacista, con la elaboración de dos documentos políticos: la Declaración de Kandy y la Agenda Política de Acción Común. La Declaración de Kandy se leyó el 13 de septiembre en la ceremonia de clausura del foro, e incluye entre sus próximos pasos acciones como un día mundial de movilización contra el imperialismo, el genocidio, la guerra y el uso del hambre como arma. Esto se alinea con la Acción de Incidencia Global presentada por la Plataforma Transnacional de Migrantes-Europa durante el foro sobre el cambio sistémico de la narrativa sobre los migrantes y los refugiados.
Voces desde el campo 11
Las instituciones académicas se unen al movimiento: intercambio de conocimientos hacia la convergencia
Bruno Prado, Bhoopendra Kuma, Yukari Sekine, Colectivo de Académicos-Activistas Agrarios del Sur
En el 3er Foro Global Nyéléni se ha producido el primer dialogo en un Foro Investigadores y Movimientos, con más de 70 participantes, del cual ha surgido un compromiso compartido para profundizar este diálogo, reconociendo que las luchas por la soberanía alimentaria y la transformación sistémica son inseparables de la democratización del conocimiento.
Se invitó al Colectivo de Académicos-Activistas Agrarios del Sur (CASAS por sus siglas en inglés)[2] a contribuir a este proceso, apoyando la creación de espacios donde les investigadores, líderes comunitarios y organizadores de movimientos pudieran reunirse en pie de igualdad: todes elles generadores y portadores de conocimientos. Estos intercambios pusieron de relieve que una transformación genuina requiere relaciones horizontales entre diversos sistemas de conocimiento, donde el aprendizaje fluye en todas direcciones.
A lo largo de las conversaciones, les participantes solicitaron la descolonización de la producción de conocimientos y cuestionar las prácticas de investigación extractivistas, corporativas y de enfoque descendente. Les académicxs activistas compartieron experiencias de coproducción de conocimiento con las comunidades y reafirmaron que la investigación debe responder a las necesidades de las personas y no a los intereses del capital.
Los debates también señalaron la importancia de crear coaliciones de conocimiento amplias e intersectoriales que conecten los movimientos sociales, las universidades y las instituciones públicas. Les participantes coincidieron en la necesidad de apoyar a les académicxs activistas más jóvenes y que están al principio de su carrera, fomentar agendas de investigación colectivas y comunicar el conocimiento de forma más accesible a través de foros comunitarios, podcasts y formatos visuales creativos.
De cara al futuro, la colaboración entre el mundo académico y los movimientos debe continuar como un recorrido colectivo y participativo. El proceso Nyéléni nos recuerda que el conocimiento no es un privilegio, sino una herramienta compartida para la transformación sistémica: basada en la confianza, la igualdad y la solidaridad, y construida a través de la convergencia continua de diversas luchas y formas de conocimiento.
Voces desde el campo 12
Tendiendo puentes: los sindicatos en Nyéléni
Chris Spindler, AMWU, IndustriALL Global Union
Incluso cuando el movimiento sindical solo representa a una minoría de trabajadores, suele ser el movimiento sindical organizado el que fija el programa en materia de condiciones laborales e industriales. Es lo que las potencias capitalistas tratan de romper: quieren acabar con el trabajo organizado.
Hoy en día, el movimiento sindical se enfrenta a muchos retos. Sin seguir un orden en particular, y sin pretensión de ser exhaustivos cabe citar: la tecnología y la automatización; la influencia política; la confrontación y la organización contra las leyes antisindicales; la organización más allá del lugar de trabajo, e incluso a nivel internacional. La respuesta que los sindicatos den a estas cuestiones afectará drásticamente a su relevancia, su crecimiento y su capacidad para conseguir mejores condiciones para sus miembros y la comunidad en general.
El proceso Nyéléni también plantea retos al movimiento sindical: trabajar con movimientos sociales y comunitarios más amplios, no solo con los partidos políticos tradicionales; reforzar la participación en la comunidad como fuerza progresista, junto con las campañas industriales; y desafiar el sistema político en lugar de aceptar su marco conservador.
El movimiento Nyéléni se opone a la idea de que los alimentos son principalmente una mercancía o una fuente de ingresos por exportación, y que los países deben competir por una productividad cada vez mayor. Las organizaciones comunitarias y los sindicatos, cada uno a su manera, están cuestionando estas premisas sobre la alimentación y el modo en que es regulada por el sistema político actual.
Nyéléni 2025 reunió a un conjunto notable de activistas comprometidos que realizan una labor extraordinaria en sus comunidades. Se trata de un movimiento hacia el cambio social en el que los sindicatos deben participar y, cuando sea posible, sumarse a las campañas pertinentes.
He empezado con preguntas clave que el movimiento sindical debe responder por su propio bien y por el bien de la comunidad en general, y creo que el proceso Nyéléni también debería reflexionar sobre cuestiones similares:
● ¿Cómo participará el proceso Nyéléni con el movimiento sindical, considerando que compartimos ideas pero trabajamos de manera diferente y en espacios distintos?
● ¿Existen campañas en las que Nyéléni pueda identificar un terreno común con el movimiento sindical?
● ¿Cómo transita el proceso Nyéléni desde ser un grupo comunitario y social a ser un movimiento para el cambio social? Aunque en el foro se habló de un cambio fundamental, esta cuestión no se ha abordado.
● ¿Hay planes, en un futuro próximo, para debatir estas y otras cuestiones relacionadas con la participación sindical?
Nyéléni ha sido un evento increíble y estimulante, que ha supuesto un desafío para mi trabajo personal de campañas y estoy seguro de que también para muchas otras personas.
Voces desde el campo 13
La Justicia Lingüística como práctica en el proceso Nyéléni
Salimos de la sombra: sostener la palabra también es parte de la lucha
Colectivo para la Autogestión de las Tecnologías de la Interpretación (COATI)
El proceso Nyéléni incorporó la Justicia Lingüística como práctica esencial, reconociendo que sostener la palabra también es parte de la lucha. En el encuentro celebrado en Kandy participaron más de 750 personas de todo el mundo y, por primera vez, se logró la interpretación simultánea en 18 lenguas.
Desde COATI se acompañó todo el proceso, aportando tecnología, coordinación y compromiso político. Se convocó a 73 intérpretes voluntaries y a cuatro técniques de la región Asia-Pacífico, contribuyendo también a la autonomía tecnológica regional.
El Grupo de Trabajo (GT) Interpretación conformó un equipo diverso e inclusivo de intérpretes, traductores y técniques representando acentos del Sur y del Norte global, distintas edades, géneros y trayectorias militantes y profesionales. Esta diversidad, más que una decisión, fue una consecuencia natural de la red construida, donde la pluralidad de voces generó un intercambio humano profundo y fortaleció el trabajo colectivo por la Soberanía Alimentaria.
COATI asumió además un reto técnico y logístico inédito, demostrando que la autogestión y las tecnologías libres pueden alcanzar —e incluso superar— lo que los proveedores de servicios del mercado no logran: sostener procesos complejos con cuidado, creatividad y cooperación.
La Justicia Lingüística es un ejercicio de palabra y escucha que construye igualdad. Quienes la hacen posible no son simples prestadores de servicio, sino sujetxs comprometides, parte activa de las luchas.
Por primera vez, la Declaración Final del Foro Global Nyéléni reconoció a intérpretes y traductores como parte de las luchas. Nosotres queremos hacerlo extensible a todos los equipos técnicos y voluntaries como parte fundamental de las luchas colectivas, ya que hicieron posible que la palabra circulara en pos de la participación plena y justa. Nuestro agradecimiento más profundo a todes elles, que pusieron cuerpo y corazón para que la Justicia Lingüística fuera una realidad viva en Nyéléni.
Mas información en el Fanzine producido por COATI (en ingles, francés y español).
Voces desde el campo 14
Comunicaciones populares en el 3er Foro Global Nyéléni
Rohan Antony, A Growing Culture
Para el 3er Foro Nyéléni celebrado en Kandy, Sri Lanka, las comunicaciones populares no fueron una idea improvisada, sino una táctica vital para dar forma a la voz colectiva y la imaginación política del proceso. Fue una forma de garantizar que las voces de les líderes de base resonaran mucho más allá de las salas donde se pronunciaron, en las luchas cotidianas que se desarrollan en las calles, los campos, las fábricas y las comunidades de todo el mundo.
El Espacio de Comunicaciones Nyéléni reunió a un equipo de quince comunicadores de movimientos y organizaciones aliadas, junto con un grupo dedicado de voluntarios de Sri Lanka. Con micrófonos, cámaras, pinceles y bolígrafos, trabajaron colectivamente y sin descanso para animarel foro con energía, imaginación y alegría, y hacer que el momento fuera accesible para todos en Kandy y mucho más allá.
La Radio Nyéléni llenó las salas de conversaciones, reflexiones y canciones de resistencia procedentes de todos los movimientos. El equipo audiovisual captó momentos poderosos e íntimos que darán forma a la memoria visual de este encuentro durante los próximos años. Un equipo de redacción resumió los debates, las decisiones y las celebraciones del día en un boletín diario multilingüe, garantizando que todes les participantes, y aquelles que seguían el evento desde lejos, pudieran mantenerse informados. Por medio de las redes sociales y la prensa, las actualizaciones y las voces desde el terreno llegaron a miles de personas en todo el mundo. Les artistas transformaron paredes, pasillos y espacios compartidos en lienzos vivos que contenían la verdad emocional del foro, mostrando arte de resistencia de todo el mundo, rincones creativos donde los delegados podían dibujar, pintar y relajarse, y un mural participativo que inmortalizó nuestro momento colectivo en Kandy.
Este esfuerzo colectivo también desveló una verdad más profunda: la comunicación no está separada de la lucha, sino que forma parte de ella. Es donde se disputa la narrativa, se forja la solidaridad y se recupera el poder. La Declaración de Kandy y la Agenda Política Común lo afirmaron al reconocer la comunicación popular feminista de base como un frente estratégico para la transformación sistémica y al recordarnos que la soberanía no solo consiste en controlar lo que cultivamos, sino también en recuperar el poder sobre nuestras historias: historias de quiénes somos, por qué resistimos y el mundo con el que soñamos.
[1] ATI (2023) Trayectorias hacia el cambio de sistema: Transformar un mundo en crisis en post de un futuro justo y sustentable.
[2] Aguiar, D., et al. (2023). Transforming critical agrarian studies: Solidarity, scholar-activism and emancipatory agendas in and from the Global South. The Journal of Peasant Studies, 50(2), 758–786.