GRUPO DE TRABAJO TEMÁTICO 5 – Apuntes para guiar
CONTEXTO
Mientras el calentamiento global, la conmoción política y la escasez de recursos naturales aumentan, prevemos que los conflictos y los desastres lamentablemente se multiplicarán en todo el mundo. Por lo tanto, la discusión acerca de cómo impactan sobre nosotros y cómo respondemos, es importante para el movimiento por la soberanía alimentaria, pero ha recibido poca atención hasta el momento. Muchos desastres no son “naturales”, aunque son detonados por eventos climáticos o sísmicos que están más allá de nuestro control. Los efectos desastrosos de estos eventos son el resultado de actividades humanas como la deforestación, la eliminación de manglares, la quema de combustibles fósiles, la construcción por debajo de los estándares, y la mayoría de ellos tienen un mayor impacto sobre los pobres, quienes sufren más severamente, por ejemplo, las inundaciones, terremotos y huracanes.
Los conflictos, guerras, ocupaciones y desastres tienen una relación similar y compleja con la soberanía alimentaria. Hemos visto casos donde la falta de soberanía alimentaria ha conducido a conflictos y desastres “naturales” de origen humano. Por otra parte, la lucha por el control de los recursos naturales constituye la raíz de muchos conflictos, tanto locales como internacionales. La respuesta típica de los donantes y los gobiernos al “apoyar” a las comunidades afectadas por guerras o desastres naturales, es el envío de ayuda alimentaria, lo cual en realidad constituye un ataque a la soberanía alimentaria. Las guerras y los desastres son crecientemente utilizados como oportunidades para tomar territorios, mercados y recursos naturales de pueblos que son forzados a abandonar sus tierras y vivir como refugiados. Las guerras también contaminan tierras agrícolas y forestales, así como recursos hídricos, y convierten a la producción de alimentos en una actividad extremadamente riesgosa para las comunidades. Los proyectos de “reconstrucción” tras los conflictos/ guerras/ desastres frecuentemente privan a las comunidades afectadas de sus tierras y otros recursos productivos.
Es importante que examinemos casos de cómo un abordaje desde la soberanía alimentaria ha contribuido al fortalecimiento de las comunidades en contra de los impactos de conflictos y desastres. Al examinar casos exitosos de planificación local de emergencia y preparación y respuesta para desastres, podemos intentar identificar los “elementos” del éxito. Igualmente es importante realizar una evaluación crítica de la ayuda alimentaria para poder exponer los intrincados vínculos entre la política y el hambre. Finalmente, debemos examinar qué tan exitosos han sido nuestros intentos por lograr solidaridad internacional frente a los conflictos, guerras y desastres, y cómo podemos fortalecerlos.
¿En pos de qué estamos luchando?
¿La soberanía alimentaria tiene alguna relevancia real para las comunidades que sufren conflictos o desastres? ¿El movimiento por la soberanía alimentaria solo es útil para movilizar la solidaridad internacional, o existen formas prácticas en que el movimiento ha sido o puede ser útil en situaciones de conflicto o desastre?
¿Qué implica la soberanía alimentaria para los/las niños/as, jóvenes y mujeres que son los principales expuestos a los daños que generan esos conflictos, ya que su vínculo con la tierra es mucho más cercano que el de los frecuentemente móviles hombres?
¿Cómo podemos describir los ejemplos positivos de respuesta a los desastres y conflictos que sirven para fortalecer la soberanía alimentaria, construir resistencia y movimientos?
¿En contra de qué luchamos?
La ayuda alimentaria ha sido una herramienta para la degradación ambiental y el reemplazo de los esfuerzos nacionales orientados a la producción de alimentos y la soberanía alimentaria.
¿Cómo podemos detener la ayuda alimentaria innecesaria y otras formas destructivas de asistencia internacional, que no son sólo traídas a nosotros por organizaciones internacionales y gobiernos, sino también por ONGs?
¿Cómo podemos resistir la apropiación de tierras y otros recursos que sobreviene a los proyectos de “reconstrucción” de conflictos y desastres?
¿Qué podemos hacer al respecto?
¿Qué ejemplos positivos de misiones de solidaridad internacional y campañas en el mundo pueden servirnos para respaldar la defensa de la soberanía alimentaria?
¿Qué campañas e iniciativas comunes podemos construir para apoyar a las comunidades afectadas por conflictos, guerras y desastres, basadas en los principios de la soberanía alimentaria?
¿Cómo podemos realizar una demanda y campaña colectiva por la soberanía alimentaria que esté en el centro de los programas de reconstrucción tras conflictos, guerras y desastres?